jueves, 10 de enero de 2013

ALUVION DE RANRAHIRCA 10 DE ENERO 1962

Ranrahirca, dos veces afectada por aluviones

 Un día como hoy 10 de enero, en 1962, se produjo un aluvión que se origina en el Nevado Huascarán a las 6:30 p.m, alud que  arrasó la ciudad de Ranrahirca capital del distrito del mismo nombre en la provincia de Yungay; así como a las poblaciones de Yanama Chico, Shacsha y la mitad de Huarascucho. Se calcula un saldo de entre 4 000 a 5 000 victimas y mucho más de cifras extraoficiales que nunca se conocerán.
Los desastres en el Perú son un problema en aumento y su impacto, cada vez mayor debido a que sólo se reacciona cuando el fenómeno ya está encima.
Es tiempo, pues, de que aprendamos a "prever antes que lamentar".
Entre 1970 y el año 2003 se tienen registrados 1.446 desastres en Ancash, evidenciándose un marcado incremento de los mismos en los últimos años.
Hace muchos años la gente pensaba que los desastres tenían su origen en un Dios o dioses que, molestos con los humanos por alguna razón, o por capricho o rabia, desencadenaban fuerzas terribles. Pero pasó el tiempo, los avances de la ciencia y la mejor comprensión de esas fuerzas desviaron la responsabilidad de los desastres hacia “La Naturaleza”, considerándola como algo externo a los seres humanos, de carácter (indómito,) salvaje e inclemente cuando descargaba su “furia”. Casi actualmente se comprendió que la naturaleza no es malvada a ratos y maravillosa de ordinario con las comunidades que osan habitar sus predios. Finalmente, en el presente,  la visión del origen de los desastres se ha enfocado sobre nosotros, los hombres y mujeres que pretendemos “conquistar” todos los rincones del planeta, haciendo poco o ningún caso de que en algún momento la naturaleza actuará, sin maldad alguna, encontrándose con nuestras ciudades y poblados justo en el campo de acción de sus fuerzas mas intensas.
La principal estrategia para motivar a los miembros de una comunidad a unirse en un único y frontal compromiso de autoprotección, defensa y conservación del hábitat es: educar, informar, aleccionar sobre la causa de los fenómenos potencialmente destructivos, y de las principales estrategias de prevención, alerta y respuesta a las contingencias y emergencias y capacidad de rehabilitación y reconstrucción de los posibles daños.
La educación es la acción central que dinamiza los sistemas de Prevención y Atención de Desastres, la educación abre la posibilidad de interiorizar conocimientos y afirmar actitudes y habilidades para hacer frente a las situaciones de desastre producidas por fenómenos naturales o  producidas por el hombre ( antrópicos.)
Rendimos un homenaje desde este medio a los ranrahirquinos que forjaron y resurgieron su pueblo querido desde la tragedia y hoy es un distrito pujante, trabajador, luchador, identificado con su terruño. Es que cuando vivimos eventos dificiles nos lleva a la unión y a valorar lo que tenemos. Por eso todo ranrahirquino afirma. AHI DONDE EXISTA UN RANRAHIRQUINO, AHI RENACERÁ RANRAHIRCA.
Recordemos se cumplen 52 años, reflexionando y educando a las nuevas generaciones.
Yungay Noticias.